Sacerdotisa Psíquica- Mezcla de Incienso Suelto [Sahumerio*]
Sacerdotisa Psíquica- Mezcla de Incienso Suelto [Sahumerio*]
"Esta mezcla fue creada especialmente para ayudar en la adivinación, el trabajo con los sueños y otras actividades que pueden requerir el uso de sentidos de otro mundo. Esta mezcla es muy potente, no recomiendo usarla si eres nuevo en la quema de incienso suelto". - Jazmine, cofundadora de Xeden
El incienso suelto se compone de materiales aromáticos naturales finamente molidos o triturados, como resinas, hierbas, maderas y otras materias vegetales. A diferencia del incienso en barra o en cono, el incienso suelto no está preformado ni unido.
Usos:
1. Prácticas espirituales: Se utiliza ampliamente en rituales espirituales, incluidas la meditación, la oración y las ceremonias de limpieza. Se cree que el humo fragante lleva oraciones a los cielos y purifica el espacio.
2. Usos ceremoniales: El incienso suelto es parte integral de diversas ceremonias culturales y religiosas, y simboliza la purificación y la presencia de lo divino. Se cree que el uso de incienso en los rituales protege de las energías negativas, invita a los espíritus buscados y santifica el espacio.
El incienso suelto proporciona una forma versátil y enriquecedora de mejorar el entorno y el bienestar, cerrando la brecha entre los reinos físico y espiritual con su presencia aromática.
Ingredientes: Artemisa (hojas), Damiana (hojas), Albahaca Sagrada (hojas), Incienso (resina), Corteza de sauce blanco
Usar:
- Reúna los materiales:
- incienso suelto
- disco de carbón
- Quemador de incienso o plato resistente al calor.
- Pinzas
- Encendedor o fósforos
- Arena o ceniza (opcional, para protección adicional contra el calor)
2. Prepare el quemador de incienso:
- Coloque el quemador de incienso sobre una superficie estable y resistente al calor.
- Opcionalmente, llene el quemador con una capa de arena o ceniza para ayudar a distribuir el calor y proteger el quemador.
3. Encienda el disco de carbón:
- Sostenga el disco de carbón con tenazas o pinzas.
- Enciende un borde del disco de carbón con un encendedor o una cerilla. Comenzará a chispear y crepitar cuando se encienda.
- Una vez que el disco de carbón comience a brillar y deje de chispear, colóquelo en el centro del quemador de incienso. Este proceso suele tardar aproximadamente un minuto.
4. Permita que el carbón se caliente:
- Deje que el disco de carbón se caliente durante unos 5 a 10 minutos hasta que brille completamente en rojo y esté cubierto con una capa de ceniza. Esto indica que está listo para el incienso.
5. Agrega el Incienso Suelto:
- Espolvorea con cuidado una pequeña cantidad de incienso suelto sobre el disco de carbón caliente. Tenga cuidado de no agregar demasiado de una vez, ya que puede abrumar el carbón y apagarlo.
6. Disfruta del incienso:
- El incienso suelto comenzará a arder y liberará su fragancia. Puedes agregar más incienso según sea necesario para mantener la intensidad deseada del aroma.
7. Supervisar y mantener:
- Esté atento al incienso y al carbón para garantizar una combustión segura. Si el carbón se enfría, es posible que sea necesario reemplazarlo.
- Cuando termines, deja que el carbón y el incienso se enfríen por completo antes de desechar los restos.
Consejos de seguridad:
- Utilice siempre herramientas y superficies resistentes al calor.
- Nunca dejes el incienso encendido sin supervisión
- Mantenga el quemador de incienso fuera del alcance de los niños y las mascotas.
- Asegure una ventilación adecuada en la habitación para evitar la acumulación excesiva de humo.
- No ingerir
*Sahumerios
Un Sahumerio es un tipo de incienso o humo ritual utilizado en diversas prácticas culturales y religiosas, particularmente en América Latina.
La práctica de usar Sahumerio implica quemar hierbas, resinas y otras sustancias aromáticas específicas para crear humo fragante, que luego se usa para la limpieza espiritual, la purificación y para crear un espacio sagrado.
El uso de Sahumerio tiene profundas raíces en las culturas indígenas precolombinas de toda América. Los grupos indígenas utilizaban incienso en sus rituales y ceremonias.
Con la llegada de los españoles y la expansión del catolicismo, la práctica de quemar incienso se integró a los rituales cristianos, fusionando tradiciones indígenas y europeas.